Como dice el autor Manuel Castells en su artículo El reverdecimiento del yo: el movimiento ecologista que toda, acción colectiva, la política y los discursos que se agrupan bajo el nombre de ecologismo son tan diversos que ponen en entredicho la idea de un movimiento. Sin embargo el autor sostiene que es precisamente esta diversidad de teorías y prácticas las que caracteriza al ecologismo como una nueva forma de movimiento descentralizado, multiforme, articulado en red. La lucha constante no por el “medio ambiente” sino por el ambiente completo, permite esta rica diversidad de sectores trabajando por la humanidad, considero al igual que el autor que esa pluriversidad de teorías y prácticas, hace rica la lucha de estos sectores. Creo que una de las estrategias de los enemigos del ambiente, no solo son las constante amenazas de denuncias judiciales contra sus líderes, sino generar dudas sobre su construcción de grupo para desmovilizarlos, sin embargo estos grupos se caracterizan por una creencia y una fuerza sobresaliente, que han logrado posicionarse no solo a nivel social en Costa Rica sino sus luchas son reconocidas a nivel internacional.
Como señala José Antón "Pese a la desarticulación de la sociedad civil y la descomposición de la clase política, o precisamente por ello, parece que este fenómeno de mundialización negativa ha renovado la acción de muchos movimientos sociales en todo el planeta. Estos movimientos poseen un alto nivel de flexibilidad organizativa y sensibilidades diferentes como expresión de la pluralidad de la sociedad civil relacionada con los problemas y conflictos de nuestras "modernas" sociedades postindustriales." (LA PEDAGOGÍA CRÍTICA DESDE LA PERSPECTIVA DE LOS MOVIMIENTOS SOCIALES, 2005)
Es decir, es precisamente la idea de no utopía, del discurso único, de la muerte de los discursos (especialmente los reivindicatorios), la sobre explotación, el hipercontrol, el centralismo... que han hecho evidente la necesidad de protestar, resistir, luchar y transformar (o erradicar) esas estructuras fundacionales de culturas depredadoras.
Parafraseando a Isacc Felipe Azofeifa, es cuando está más oscura la noche la señal más precisa de que va amanecer. Cuanto más nos repriman, debe ser señal de nuestra revuelta (teórica y práctica a la vez). De allí la fuerza y la legitimidad del movimiento ambientalista y demás movimientos (nuevos) sociales que han surgido como protesta ante la globalización neoliberal, misma que precariza a las personas y la naturaleza misma.
A partir de las discusiones en clase sobre los movimientos ecologicos, y escuchando los aportes de las compañeras (os). me perimitio repensar estos movimientos en primera persona, por mis acciones en pro del ambiente reciclando en casa, practicando un ahorro energetico y otras mas, talves en algun momento deje de ver la maquinaria ideologica que esta detrás de muchas de estas propuestas a nivel comercial , sin mayor conciencia social. Es aquí donde considero necesario reaccionar y demandar por propuestas reales sin dobles discursos ni intereses, que luchen realmente por el ambiente y el ecologismo.
Como dice el autor Manuel Castells en su artículo El reverdecimiento del yo: el movimiento ecologista que toda, acción colectiva, la política y los discursos que se agrupan bajo el nombre de ecologismo son tan diversos que ponen en entredicho la idea de un movimiento. Sin embargo el autor sostiene que es precisamente esta diversidad de teorías y prácticas las que caracteriza al ecologismo como una nueva forma de movimiento descentralizado, multiforme, articulado en red.
ResponderBorrarLa lucha constante no por el “medio ambiente” sino por el ambiente completo, permite esta rica diversidad de sectores trabajando por la humanidad, considero al igual que el autor que esa pluriversidad de teorías y prácticas, hace rica la lucha de estos sectores. Creo que una de las estrategias de los enemigos del ambiente, no solo son las constante amenazas de denuncias judiciales contra sus líderes, sino generar dudas sobre su construcción de grupo para desmovilizarlos, sin embargo estos grupos se caracterizan por una creencia y una fuerza sobresaliente, que han logrado posicionarse no solo a nivel social en Costa Rica sino sus luchas son reconocidas a nivel internacional.
Como señala José Antón "Pese a la desarticulación de la sociedad civil y la descomposición de la clase política, o precisamente por ello, parece que este fenómeno de mundialización negativa ha renovado la acción de muchos movimientos sociales en todo el planeta. Estos movimientos poseen un alto nivel de flexibilidad organizativa y sensibilidades diferentes como expresión de la pluralidad de la sociedad civil relacionada con los problemas y conflictos de nuestras "modernas" sociedades postindustriales." (LA PEDAGOGÍA CRÍTICA DESDE LA PERSPECTIVA DE LOS MOVIMIENTOS SOCIALES, 2005)
ResponderBorrarEs decir, es precisamente la idea de no utopía, del discurso único, de la muerte de los discursos (especialmente los reivindicatorios), la sobre explotación, el hipercontrol, el centralismo... que han hecho evidente la necesidad de protestar, resistir, luchar y transformar (o erradicar) esas estructuras fundacionales de culturas depredadoras.
Parafraseando a Isacc Felipe Azofeifa, es cuando está más oscura la noche la señal más precisa de que va amanecer. Cuanto más nos repriman, debe ser señal de nuestra revuelta (teórica y práctica a la vez). De allí la fuerza y la legitimidad del movimiento ambientalista y demás movimientos (nuevos) sociales que han surgido como protesta ante la globalización neoliberal, misma que precariza a las personas y la naturaleza misma.
A partir de las discusiones en clase sobre los movimientos ecologicos, y escuchando los aportes de las compañeras (os). me perimitio repensar estos movimientos en primera persona, por mis acciones en pro del ambiente reciclando en casa, practicando un ahorro energetico y otras mas, talves en algun momento deje de ver la maquinaria ideologica que esta detrás de muchas de estas propuestas a nivel comercial , sin mayor conciencia social. Es aquí donde considero necesario reaccionar y demandar por propuestas reales sin dobles discursos ni intereses, que luchen realmente por el ambiente y el ecologismo.
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